Un servicio de cobro de cheques es lo que dice: permite a una persona que no utiliza un banco cobrar su efectivo con cheques.
Es importante recordar que estos servicios no son bancos. En cambio, son “escaparates” o negocios como Amscot, ACE Cash Express y Check City que ofrecen varias transacciones sencillas como el cambio de cheques, giros postales, préstamos de día de pago o pago de facturas por una tarifa.
También pueden ser grandes minoristas como Walmart, Kmart, Publix, Kroger y Food Lion.
Están muy extendidos y ofrecen ayuda a quienes necesitan una forma de cobrar una nómina u otro cheque, como un reembolso del IRS o un cheque de la Seguridad Social.
La organización Financial Service Centers of America (FISCA), que representa a este sector, informa de que hay más de 13.000 “tiendas” de cambio de cheques en todo el país. Atienden a más de 30 millones de clientes al año y cambian más de 58.000 millones de dólares en cheques.
En total, se estima que proporcionan 106.000 millones de dólares en servicios financieros cada año.
¿Cómo funciona el cambio de cheques?
El sistema no es difícil. Sólo tiene que llevar su cheque y su tarjeta de identificación a un establecimiento de cambio de cheques, firmar el reverso del cheque y podrá convertirlo en efectivo con cheques. Se llevará a casa el valor del cheque, menos la comisión. Algunos establecimientos pueden exigirle que rellene un formulario.
Una de las principales diferencias entre utilizar un banco y un servicio de cobro de cheques es que la persona puede poner el dinero en su bolsillo inmediatamente.
Algunos bancos tienen una retención de tres días para los cheques que se depositan en las cuentas. Eso significa que si usted deposita un cheque el lunes, es posible que no pueda acceder a los fondos hasta el jueves de esa semana.
Si hay una necesidad inmediata de fondos, el servicio de cobro de cheques convertirá el cheque en dinero en efectivo, que podrá llevar fuera de la oficina.
¿Quién puede necesitar este tipo de servicio?
Las personas no bancarizadas o que no lo están: A algunas personas no les gusta utilizar los bancos. Otras tienen un historial problemático de sobregiros o de no pagar sus cuotas y los bancos no les proporcionan una cuenta.
Para estas personas, un servicio de cambio de cheques no es algo agradable, sino una necesidad.
Personas que necesitan dinero en efectivo inmediatamente: La Reserva Federal informa de que el 13% del país que tiene una cuenta bancaria sigue utilizando los servicios de cambio de cheques. FISCO dice que el 60% de los clientes tiene una cuenta bancaria o en una cooperativa de crédito.
Estas personas se sienten atraídas por la comodidad de los servicios de cambio de cheques y la posibilidad de obtener el efectivo con cheques inmediatamente. Algunas personas no pueden esperar los pocos días que tarda un cheque en ser cobrado en el banco si, por ejemplo, hay que pagar la hipoteca o la factura de la luz.
Personas que no disponen de servicios financieros tradicionales en su zona: Las zonas rurales o pobres pueden no tener una plétora de bancos. Sí, la banca online está disponible, pero las comunidades pobres o rurales pueden no tener acceso a un ordenador o a Internet.
Además, algunas personas necesitan poder cobrar un cheque a horas intempestivas, lo que puede hacerse en muchas tiendas de cambio de cheques establecidas en comunidades con escasa o nula bancarización.